domingo, 9 de septiembre de 2018

10 formas simples de practicar la bondad todos los días



Todos sabemos que debemos tratar a las personas con amabilidad, pero a veces, en nuestras estresantes vidas cotidianas, podemos olvidarnos de tratar a las personas con respeto y compasión. De hecho, según una encuesta, el 76 por ciento de los encuestados dice que el mundo es un lugar menos amable que hace 10 o 20 años. La buena noticia es que los humanos estamos naturalmente conectados para ser amables, a veces solo se necesita un poco de reflexión. Entonces, si deseas difundir buenas acciones y compasión a las personas en tu vida, aquí hay 10 formas simples de practicar la bondad todos los días.

Usa tus buenos modales
Estoy seguro de que tus padres te dijeron esto o puedes decírselo a tus propios hijos, pero a veces simplemente nos olvidamos de decir "por favor" y "gracias". No olvide decir "por favor" cuando solicite algo, ya sea que esté hablando con un camarero, un representante de servicio al cliente, un cajero, un amigo o incluso con un extraño al azar. Decir "por favor" cambia el tono de una solicitud. En lugar de hacer una demanda, estás siendo cortés con la persona, lo que hace que sea más probable que quiera ayudarte.
Por otro lado, cuando dices "gracias", estás expresando gratitud por un comportamiento o servicio y estás dejando que la persona sepa que aprecias y valoras su esfuerzo. Nadie quiere sentirse insignificante, di "por favor" y "gracias" y alégrale el día a alguien.

Sonríele a un extraño
¿Cómo te sientes cuando alguien te sonríe? En la mayoría de los casos, te produce bienestar y felicidad, y probablemente te sonrías de vuelta. La sonrisa es realmente contagiosa. Según un estudio publicado en la revista Tendencias en las Ciencias Cognitivas, a menudo imitamos las expresiones faciales de las emociones debido a la estimulación sensorio-motora. Entonces, cuando vemos a alguien sonreír, a menudo hacemos lo mismo.
No importa como te vaya el día, la sonrisa puede hacer que te sientas mejor; es difícil enojarse cuando estás sonriendo. Por lo tanto, comparte estos buenos sentimientos con los demás, incluso aunque no conozcas a la persona, y asegúrate de sonreír a las personas con las que te encuentras.

No mezquines los abrazos
Como una sonrisa, un abrazo amistoso puede alegrarle el día a una persona. Un buen abrazo puede levantar el ánimo de cualquier persona y hacer que se sienta amada y apreciada, o simplemente recibir ese empujoncito que necesita para enfrentar un día difícil. Pero ¿sabías que este simple acto de afecto también nos afecta químicamente? "Básicamente, un buen abrazo es la forma más rápida para que la oxitocina fluya en tu cuerpo", según Susanna Halonen, una experta en psicología positiva de Happyologist. "La oxitocina, también conocida como la 'droga del amor', calma el sistema nervioso y aumenta las emociones positivas".
Así que, si quieres ayudar a alguien a sentirse bien y al mismo animarte tú también, ¡ofrece un abrazo agradable y reconfortante!

Usa el cambio para producir cambios
¿Tiene algún cambio adicional en tu bolsillo o billetera? ¿Por qué no usarlo para alegrarle el día a otra persona? En lugar de guardarlo en tu alcancía, u olvidarlo por allí tirado, ponlo en un parquímetro o en una lata de recolección en el supermercado. Ni siquiera te hará falta y estarás ayudando a otra persona o causa.

Envía tarjetas reales no virtuales
Con Facebook y otras redes sociales, las personas tienden a decir "hola" o "feliz cumpleaños" a través de medios virtuales. Como resultado, las personas reciben menos tarjetas de felicitación. Puedes levantar el estado de ánimo de alguien al instante al enviarle una tarjeta por correo. Si bien siempre puedes enviar una tarjeta de cumpleaños o una tarjeta navideña, ¿por qué no enviar una tarjeta sin más motivo que el que alguien sepa que está en tus pensamientos? A veces, las cartas inesperadas son las mejores, y garantizarán una impresión duradera y positiva.

Usa el teléfono para “hablar”
Probablemente envíes muchos mensajes de texto a lo largo del día, pero ¿cuándo fue la última vez que realmente te conectaste con alguien por teléfono? Llama a un ser querido o a una amistad con quien no hayas hablado por un tiempo para ponerte al día. Los mensajes de texto no pueden reemplazar la sensación de una conversación de corazón a corazón por teléfono.

Ayuda a un extraño
Abre la puerta a alguien, compra café para la persona que está detrás de ti en la fila de la cafetería, comparte tu almuerzo con alguien o sostén un paraguas para alguien que necesite ayuda. A veces, las acciones más pequeñas pueden tener el mayor impacto.

Hornea galletas o compra donas
Todo el mundo ama las golosinas, ¿por qué no hornear galletas y llevarlas a la casa de un vecino, a la escuela de tus hijos o sobrinas o a cualquier otra persona que quiera endulzarse el día? También puedes comprar galletas o golosinas y llevarlas a la estación de bomberos o de la policía local.


Dale el puesto a alguien en una fila
Si la persona que está detrás de ti en el supermercado solo tiene un par de artículos y tu carrito está lleno hasta el tope, ¿por qué no dejarle pasar delante de ti en la fila? Le ahorrarás tiempo, y se sorprenderá de tu bondad. ¡Incluso pueden corresponder al gesto si se encuentran en una situación similar la próxima vez!

Deja un poco de dinero tirado por ahí
Es posible que no desees hacer esto todos los días, pero de vez en cuando deja un billete de $5 para que lo encuentre alguien. Esa persona afortunada estará encantada, y al instante se animará. Si prefieres no dejar dinero en un lugar al azar, siempre puedes dar un par de dólares a alguien que lo necesite o considerar donar a una organización benéfica o causa.

La bondad no requiere un gran gesto; pequeñas cosas pueden hacer una gran diferencia. Con un poco de creatividad, las posibilidades son infinitas.

Para saber en qué posición se encuentra la amabilidad en tu Perfil de Fortalezas te invito a completar el Inventario de Fortalezas.


Hasta la próxima entrega,

  
Coach Alexander Madrigal